sábado, 28 de mayo de 2016

ARGIRIA


¿Qué es la argiria?
La argiria, argyria, o síndrome de argiria, es una enfermedad producida por la ingesta prolongada de plata en forma de sales, o de metal y está caracterizada porque la piel y algunos órganos del paciente se vuelven grises, o azulosos, o gris azulado, sobre todo en las zonas expuestas al sol. El color que tiene un afectado de argiria, es simplemente espectacular.

Características

La plata puede ser depositada en la piel, por exposición industrial o como resultado de medicamentos que contienen sales de plata. Los suplementos dietéticos de plata coloidal se comercializan ampliamente para el cáncer, SIDA, diabetes mellitus y las infecciones por herpes. El uso prolongado de las sales de plata en las membranas mucosas uretral o nasal, las gotas para los ojos, la crema sulfadiazina de plata utilizada para tratar quemaduras y heridas. La argiria se ha atribuido también a los procedimientos quirúrgicos y dentales como la realización de tatuajes y la colocación de amalgama de plata en las reparaciones dentales.

Proceso que sufre nuestro organismo
Hasta hace poco, no se llegaba a entender el proceso que hacía que la exposición prolongada a sales o metal de plata tuviera esas consecuencias sobre la piel, pero recientemente, en estudios realizados en la Universidad de Brown, se ha descubierto que el mecanismo que produce ese singular color en el paciente.

Es muy interesante saber que en el proceso de la argiria en el estómago se produce una acción química (corrosión) y física (se queda con una carga positiva) formando en ese proceso, una ionización con iones de plata. Sabemos que los iones positivos buscan aliarse con otros elementos eléctricos para completarse y en ese esfuerzo, se alían con iones de sulfuro de proteínas que están en la sangre. En ese momento, la plata obtiene la capacidad de viajar por el torrente sanguíneo.

Podemos decir que la proteína es su vehículo para trasladarse. Estos iones de plata se acumulan en la piel y cuándo reciben luz, se tornan de color azul. Parece una tontería, e incluso algo más cosmético que patológico, pero la electricidad positiva puede ser muy dañina para la vida. La argiria no deja de ser una enfermedad… y además, crónica.

¿Por qué se vuelve azul la piel del paciente?
Cuándo los iones de plata reciben luz en la superficie de la piel, los electrones de los átomos que están cerca, saltan a la plata y esta se vuelve plata pura y la plata pura es azul. Precisamente la misma acción que tiene lugar en las fotografías en blanco y negro: una
película, o carrete, contiene yoduro de plata, o bromuro de plata (son dos sales incoloras que están hechas a partir de iones de plata). Cuándo ésta película recibe la luz a través de la lente de la cámara fotográfica, el área que ha recibido la luz, se queda negra porque se han formado depósitos de plata. Un paciente en vez de volverse negro, se vuelve azul por la combinación del resto de elementos que lo constituyen.
La piel de una persona con argiria, sufre un proceso muy similar al del revelado de una película fotográfica. Todos estos estudios, han abierto puertas, entre ellas el producir un tipo de plata biodegradable.

Tratamiento
El tratamiento con preparaciones despigmentantes no es satisfactorio, sin embargo, según algunos informes, el 5% de los tratamientos con hidroquinona puede reducir el número de gránulos de plata en la dermis superior y alrededor de las glándulas sudoríparas y disminuir el número de melanocitos. Los intentos de quelación para eliminar la plata del cuerpo han sido infructuosos. Los protectores solares y cosméticos pueden ser útiles para prevenir una mayor pigmentación oscura y ayuda a enmascarar la decoloración evidente.

El caso del hombre azul

Biografía

QUIMERAS HUMANAS



Cada persona es diferente, ya sea en forma de ser o, más importante, en su ADN, que puede revelar quien es con solo analizar un poco de sangre, pelo o saliva, entre otros fluidos y tejidos. Sin embargo, en el mundo existen unas pocas personas que en su cuerpo conviven
dos tipos de ADN distintos completamente. Esas personas llevan el nombre de quimeras humanas.
¿Qué son las quimeras humanas?
Este nombre se refiere a un desorden bastante extraño, por el que la persona tiene dos ADN diferentes dentro de su cuerpo: uno se encuentra normalmente en fluidos como la sangre o saliva, mientras que el segundo set se halla en los tejidos internos como los órganos.

¿Cuál puede ser su origen?
Los científicos nos desvelan que la causa puede estar en nuestro desarrollo embrionario. Ahí cuando surgen dos embriones mellizos no idénticos que, finalmente, acaban fundiéndose en un mismo. Este fenómeno tan asombroso deriva en el hecho de que en nuestro interior, dispongamos aún de esos trazos de un hermano que nunca llegó a desarrollarse, que se

fundió, por así decirlo, en nosotros dejándonos huellas de su ADN en algunas partes de nuestros órganos internos.

Lo normal es que nunca nos demos cuanta de si padecemos quimerismo o no, hasta que de pronto, por la razón que sea debemos hacernos algún tipo de prueba.
¿Cómo se diagnostica el Quimerismo?
La mayoría de las quimeras humanas nunca sabe que lo son, ello hasta que se enferman o sufren de una situación desagradable por culpa de su tan peculiar condición.

En Estados Unidos, a una mujer se le quitó la custodia de sus hijos tras comprobarse, mediante pruebas de ADN, que no era su madre. El ADN fue obtenido de una muestra sanguínea. Tras una batalla legal, en la que se repitió el examen una y otra vez, esta mujer supo acerca del quimerismo y pidió que se le tomara una nueva muestra, esta vez de tejidos.

Se examinó un nódulo de tiroides que se le había extraído recientemente y, sorpresa, el ADN de este nódulo demostraba que era la madre biológica de sus hijos. Tras una larga lucha, logró recuperar a su familia.



La mayor parte de quienes tienen quimerismo jamás lo sabrán y seguirán viviendo con su propio mellizo adentro, siendo uno de los fenómenos científicos más extraños e interesantes.



BIOGRAFÍA

Mª Isabel Capitán Díaz 1ºD

RECORDAR GRACIAS AL ADN



Un nuevo estudio científico descubre que nuestro ADN transmite información de experiencias de miedo y de estrés de generación en generación. Estamos más cerca de demostrar que la “memoria” de nuestros antepasados sobrevive a través de nosotros.Un fenómeno de este tipo puede contribuir a la etiología y al potencial de la transmisión intergeneracional del riesgo de trastornos neuropsiquiátricos, como las fobias, la ansiedad y el trastorno de estrés post-traumático.

1º. Experimento mediante ratones:


Investigadores de la la Universidad de Medicina Emory en Atlanta entrenaron a ratones a tener miedo al olor de un cerezo en flor usando shocks eléctricos impidiendo que en ese período de entrenamiento pudieran criar. Una vez que criaron, su descendencia mostró las mismas respuestas de miedo al cerezo en flor, reacciones muy diferentes a otro tipo de olores y todo ello sin haberlos experimentado anteriormente. Siguientes generaciones mostraron el mismo comportamiento. Este comportamiento se mantuvo incluso en los casos de descendencia a través de la inseminación artificial.

Los investigadores descubrieron cambios estructurales en las áreas que detectan el olor tanto en los cerebros de los ratones entrenados como en los cerebros de sus descendientes. El ADN de los animales también presentaban cambios químicos conocidos como “epigenetic methylation”, en el gen responsable de detectar el olor. Esto sugiere que la experiencia, de alguna manera se traslada del cerebro al genoma, permitiendo así, que ésta pase a generaciones posteriores.

Los investigadores esperan ahora llevar a cabo más estudios para entender cómo la información llega a ser almacenada en el ADN en un primer momento y también más estudios para saber si lo que ocurre entre ratones se puede trasladar a los seres humanos. Si esto es así, podriamos estar hablando de explicar muchas de las respuestas “irracionales” del ser humano como las fobias.



¿Posee entonces nuestro ADN también memorias espirituales y cósmicas transmitidas en los genes de nuestros ancestros?


Si este estudio sigue avanzando en la misma línea, es decir, que llega a comprobar que esto también ocurre en humanos, podría llegar a indicar que la reencarnación física de cuerpo a
cuerpo, vida tras vida, tal y como ahora mismo todos nos la podemos imaginar, desde nuestra mente limitada, no existe. Sin embargo, podría demostrar otro tipo de reencarnación.

A mi el estudio me sugiere que si “cierta información” sobre la vivencia y experiencia de mis ancestros, cada uno con su vida, se ha transmitido, a través del ADN, desde ellos hasta mi y desde mi hasta las siguientes generaciones, me está indicando que la reencarnación existe pero entendida de manera muy diferente, más bien metafórica.

Habría “una memoria” en mi árbol genealógico que ha sobrevivido desde siempre hasta hoy y que marca mi experiencia hoy. Evidentemente, algo que yo puedo cambiar y transformar a partir de mi propia experiencia pero, desde luego, influida desde antes, incluso, desde antes de mi nacimiento. Si quien reencarna es la información o una memoria, vida tras vida de los descendientes de una saga familiar.



¿Podría ser el alma “una memoria” o “cierta información”?

Cuando mi cuerpo muere yo muero y no renazco. Pero una parte de mi sigue viva en la genética de mis descendientes, y no sólo el gen que marca la enfermedad o el rasgo físico, sino aquel que vivió tal experiencia, buena o mala, traumática o feliz, del tipo que sea.

Si heredamos la memoria de las experiencias de nuestros antepasados ¿para qué la

heredamos?

Si es una experiencia feliz, para contar con el recurso que nos diera su experiencia positiva. Y si fue una experiencia no feliz, para trascenderla hasta que lo sea.


Estaríamos hablando de crecimiento y de evolución. Da igual si el cuerpo vuelve o no, si hay un alma que entra en otro cuerpo o no, si yo misma una y otra vez, o si es mi bisabuelo o biznieto cada uno en su vez. Lo que sí parece estar más claro científicamente como posible es que “cierta información de la vida anterior” sobrevive generación tras generación” y esto ya puede implicar cierta diferencia en la forma de enfrentarnos a nuestra propia vida a partir de hoy.

Eso sí con su consecuente dualidad. Heredo y por eso soy así y me planto desde el determinismo. O más bien heredo, aprendo, trasciendo y evoluciono desde el libre albedrío. Yo elijo que siga siendo una cuestión de saber más quien soy y más de donde vengo para decidir MEJOR a donde quiero llegar.

BIOGRAFÍA:


Mª Isabel Capitán Díaz 1ºd